jueves, 18 de febrero de 2010

Una carta bajo el colchón

Era un día cualquiera y diferente a la vez, casi nunca se me da por limpiar mi cuarto pero esta vez lo hice. Quise recolectar los sílabos de la universidad que se me entreveraron con otros papeles y bueno otros fueron vendidos por mi hermanita que quería ganarse algunos céntimos, claro ella no sabía la importancia de los sílabos.

En mi afán por limpiar el cuarto me inclinaba así el suelo fue ahí cuando vi algunas envolturas de caramelos bajo mi cama, estaban bien adentro apegado a la pared. Intente meter mi cuarto para llegar a ellas cuando sentí q algo toco mi cuello, Salí rápido y asustando creyendo que quizá me había picado una arañita desubicada que evitaba bajo mi cama sin yo saberlo. Fui corriendo y agarre un espejo para poder ver si encontraba alguna marca en mi cuello pero no había nada. Entonces quise saber que fue lo que raspo mi cuello, me incline nuevamente pero ya con más cuidado y encontré la punta de un papel que sobre salía por la madera que sostiene el colchón. Yo levante el colchón y vi que era una carta sucia, agarre la carta lo sacudí un poco y me tire sobre la cama, y cuando abrí el titulo decía “para Karla”. Fue entonces cuando mi mente comenzó a vagar y a retroceder 10 años atrás hasta llegar al colegio nuevamente. Me miraba estando con ella saliendo del colegio para acompañarla a su casa, bueno ella nunca dejo que le acompañe hasta su misma casa porque decía que si conocía le buscaría seguido y que mejor era verse solo en el colegio, yo insistía pero nuca pude conocer su casa pero si sabia cual era su barrio. Hasta que después de terminar los estudios un amigo me enseño cual era su casa. También dentro de mi éxtasis recordé la primera vez que le dije que le amaba, y que en silencio y con solo un abrazo me dijo que si. Recuerdo cuando nos dimos el primer beso, no sé qué paso pero no dejábamos de reírnos, creo que nos mordimos. Recordaba la primera pelea, la ira con que tiro al suelo la humilde cadenita que le compre, quizá nunca le gusto porque dije era la insignia de alianza, pero esa vez sentía que decía por fin me saco esta tontería, solo me ponía porque estábamos bien. Recordaba las cosas que asía para que me perdones, hoy me parecen estúpidas porque nunca resulto. Nunca entendí el gran daño que cometí, aunque creo q no fue así solo que uso los códigos que usan las mujeres para hablar a los hombres y que muchas veces no entendemos y por eso no nos reconciliamos.
Nunca hasta ese momento había tenido una chica tan linda como ella que me costaba resignarme a perderla. Recordaba el último día de clases donde corrí a pedirte perdón por última vez porque ya no volvería a verte. Recordé tantas cosas de ella sin siquiera empezar a leer la carta. Mi curiosidad me gano y leí ahí decía:

“Hola Karla, quisiera poder hablar contigo, quisiera que por lo menos me des unos minutos para explicarte lo que realmente paso, me cuesta mucho estar así, no lo acepto, quiero estar contigo, quiero estar bien, quiero que sea como antes. Te extraño y sé que tu también pero estas molesta conmigo y entiendo…”

Deje de leer la carta y pensé en que sería de ella ahora que han pasado 10 años. Bueno yo estoy muy bien, tengo una linda enamorada a quien quiero mucho. Pero que será de ella me pregunte. Me dio la curiosidad por volver a verla, solo verla y saber cómo estaba y quizá si volvíamos a ser amigos enseñarle la carta que tenía en mí mamo y que nunca pude hacerle llegar. Fue entonces cuando me pare y fui a dar una vuelta por su barrio, me senté en el parque frente a su casa ahí pase un buen rato leyendo un periódico, de pronto la vi saliendo de su casa con un bebe en brazos, ella estaba diferente, parece que el embarazo no le había favorecido mucho a su cuerpo, pero seguía siendo linda. Seguía usando el mismo peinado que tanto me gustaba. Yo no sabía qué hacer en ese momento, no sabía si ir y hablarle o solo me complacía de verla de lejos. Me llene de valentía y me di una vuelta para aparecer caminando frente a ella, ya estábamos cerca solo nos dividían unos cuantos metros. Yo levante firme mi mirada para verla y intentar robarle la mirada. Ella levanto también la mirada y acomodándose el cabello que tapaba su rostro me correspondió la mirada, pero dura fue mi sorpresa. Yo ya era un extraño para ella, sentí que por su mente no paso ningún recuerdo como sucedió en el mío. Una vez más me sentí estúpido asiendo eso. Tanto era mi curiosidad que ni siquiera me di cuenta que la carta que le aria leer si todo salía bien estaba sucia. Me preguntaba que tanto avía cambiado como para que no me reconozca o es que realmente si me reconoció solo que aún sigue molesta, …

3 comentarios:

  1. HAHHAHAHAH aisshhhh nadie estaría molesto después de 10 años, facil le dio roxe q la veas con el bb i se hixo la lok! wiiiii xD

    ResponderEliminar
  2. oie Christian ..limpia tu cuarto peshhh!! hahaha como no te vas a dar cuenta de esa carta q estuvo metida 10 años!!! hahhahaha

    ResponderEliminar
  3. Es interesante la forma de narrar,que sincero!. Que bueno que te animes por las cronicas. cuidate y nos vemos.

    ResponderEliminar